NUEVA YORK — Diez miembros o socios de la banda venezolana Tren de Aragua han sido acusados de dirigir un plan de tráfico de armas en la Ciudad de Nueva York que se extendió por todo Estados Unidos y aspiraba a expandirse internacionalmente, dijeron funcionarios el miércoles.
Las acusaciones, anunciadas por la fiscal del distrito de Queens, Melinda Katz, llegan después de una operación encubierta de más de 8 meses por parte de la oficina del fiscal del distrito, la Policía de la Ciudad de Nueva York y otras agencias policiales. Seis de las personas acusadas en la imputación de 120 cargos desprecintada el miércoles fueron detenidas el martes por cargos de armas de fuego, drogas y asociación delictuosa.
La banda Tren de Aragua ha sido vinculada a una serie de secuestros, extorsiones y otros delitos en todo el hemisferio occidental relacionados con un éxodo masivo de migrantes de Venezuela, donde la pandilla fue creada hace más de una década. La conciencia pública sobre el Tren de Aragua en Estados Unidos aumentó después de que imágenes de una cámara de seguridad aparecieran en redes sociales mostrando a un grupo de hombres fuertemente armados forzando su entrada a un apartamento en Aurora, un suburbio de Denver. El presidente Donald Trump dijo durante su campaña que planeaba “liberar a Aurora” de venezolanos, de los que dijo falsamente que estaban “tomando control de toda la ciudad”.
Miembros de la violenta banda callejera han sido culpados de tráfico sexual, contrabando de drogas y tiroteos policiales en todo Estados Unidos, así como de explotación de migrantes.
De los arrestados en la acusación de Queens, dos fueron puestos bajo custodia en Texas y Florida. Cuatro sospechosos fueron detenidos en Nueva York, en una operación que dejó a un policía de la ciudad con un brazo gravemente fracturado después de que un acusado lo golpeara con una puerta mientras intentaba escapar, dijeron funcionarios.
Dos de esos sospechosos habían sido acusados formalmente hasta el miércoles por la tarde.
Katz dijo que aún no se habían presentado cargos en la investigación en curso sobre el asalto al oficial. Elogió a los involucrados en la operación encubierta por incautar armas y drogas.
“A consecuencia de nuestra investigación, 34 armas peligrosas están ahora fuera de las calles, y estamos desmantelando esta banda mientras intenta establecerse localmente”, señaló Katz, quien agregó que dos de esas armas eran de tipo fantasma —armas de fuego sin números de serie que son difíciles de rastrear—, una un fusil estilo AR, y la otra un arma modificada para disparar continuamente como si fuera automática.
Otros dos sospechosos nombrados en la acusación, incluido el presunto cabecilla Enyerbert Blanco de 24 años, ya estaban bajo custodia por otros cargos, dijeron funcionarios. Otros dos están prófugos.
Las autoridades detallaron en la acusación cómo el grupo usó la aplicación telefónica WhatsApp para comunicarse sobre las ventas de armas, algunas de las cuales ocurrieron a plena luz del día en estacionamientos o con las armas escondidas en bolsas de basura.
Las autoridades alegan que tres de los sospechosos acusados, incluido Blanco, obtuvieron las armas de otros estados, entre ellas algunas que habían sido reportadas como robadas. Otro sospechoso proporcionó armas de su propio inventario. Muchos de los otros sospechosos fungieron de mensajeros para entregar las armas.
La acusación formal alega que la empresa criminal también intentó entregar armas a nivel internacional a Colombia, con la esperanza de aumentar sus ganancias. La operación encubierta frustró esos intentos, dijeron las autoridades.
Agentes encubiertos compraron algunas de las armas dentro de la operación, según la oficina del fiscal del distrito. Esos agentes también compraron 48 gramos de cocaína rosada —a la que también se le llama tusi —una mezcla de cocaína, MDMA y ketamina— a los acusados durante la operación.
El jefe de detectives del NYPD, Joseph Kenny, dijo el miércoles que todos los miembros del Tren de Aragua imputados habían ingresado al país ilegalmente aproximadamente en 2023. Indicó que el departamento de policía se había dado cuenta de las actividades de la banda en la ciudad, incluido el uso de motonetas para arrebatar teléfonos celulares y realizar robos organizados en tiendas. Dijo que la unidad de pandillas ha identificado al menos a 67 miembros de la pandilla en la ciudad.
Los arrestos del martes ocurrieron el mismo día en que la recién confirmada secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, se sumó a agentes federales para anunciar el arresto de inmigrantes buscados por cargos penales, incluida una operación en eE Bronx en la que fue atrapado Anderson Zambrano Pacheco, de 26 años. Las autoridades dicen que él formaba parte del grupo de hombres armados, algunos afiliados con Tren de Aragua, que aparecieron en el video de Aurora, Colorado.
