Bolivia.- El Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) de Bolivia ha reafirmado la imposibilidad de que un presidente sea reelegido de manera consecutiva o discontinua, cerrando definitivamente las puertas para una eventual candidatura de Evo Morales en las elecciones presidenciales de 2025. Esta decisión, clave en el panorama político del país, ha sido emitida a través del Auto Constitucional 0083/2024 ECA, en respuesta a una solicitud de enmienda de la Sentencia Constitucional 1010/2023-S4 de diciembre de 2023.
Detalles de la Resolución
La reciente decisión se deriva de un recurso presentado por el diputado José Carlos Gutiérrez, del partido opositor Creemos, quien buscó una postura clara y definitiva respecto a los límites de reelección presidencial. La resolución refuerza los principios establecidos en la Constitución boliviana y marca un precedente respecto a la interpretación de la normativa sobre mandatos consecutivos y discontinua.
Repercusiones Políticas
- Impacto en Evo Morales: Morales, quien gobernó Bolivia entre 2006 y 2019, no podrá postularse nuevamente, incluso tras una pausa en el ejercicio del poder. Esto sigue el fallo que declara inconstitucionales las maniobras que permitieron su última reelección.
- Reacciones del Movimiento Al Socialismo (MAS): El partido oficialista enfrenta ahora el desafío de presentar un nuevo liderazgo para las elecciones de 2025, en un escenario donde las divisiones internas podrían intensificarse.
- Oposición fortalecida: La ratificación de esta sentencia da un impulso a los partidos opositores, que han luchado durante años por consolidar límites claros a la reelección en Bolivia.
Contexto Histórico
El fallo retoma el debate sobre la controversia generada en 2017, cuando el TCP habilitó la candidatura de Morales para un cuarto mandato, argumentando la «preeminencia de los derechos humanos» sobre las limitaciones constitucionales. Sin embargo, la anulación de los comicios de 2019 tras denuncias de fraude y la renuncia de Morales marcaron un punto de inflexión, que culmina con esta resolución de 2024.
Con este desenlace, el TCP envía un mensaje claro: la normativa constitucional prevalece sobre cualquier interpretación que busque flexibilizar los límites a la reelección, consolidando un marco de respeto a la institucionalidad democrática en Bolivia.