Moscú.- A tres subieron las víctimas mortales en las afueras de Moscú a causa del ataque masivo ucraniano con drones de la pasada noche que dejó heridas a otras 17 personas, según los últimos datos ofrecidos por las autoridades rusas.
«Acaban de informarme de que un tercer hombre ha fallecido. Los médicos hicieron todo lo que pudieron», escribió en su canal de Telegram Yevguenia Jrustaliova, del distrito urbano de Domodédovo, situado a 15 kilómetros al sur de Moscú.
Con anterioridad, el gobernador de la región de Moscú, Andréi Vorobiov, había informado de la muerte de dos personas.
Uno de los fallecidos, precisó la autoridad regional, es un guardia de seguridad, de 38 años, de un aparcamiento de una empresa de la localidad de Domodédovo, donde más veinte automóviles quedaron calcinados por un incendio causado por la caída de un dron.
En ese mismo lugar, añadió el gobernador, resultó herido gravemente un hombre de 50 años, que falleció poco después en el hospital.
«Ahora lo más importante es prestar toda la ayuda necesaria a las víctimas y a sus familias», escribió Vorobiov, que anunció el pago de un millón de rublos, unos 11.300 dólares, a los familiares de los fallecidos.
Las autoridades aeronáuticas rusas suspendieron durante varias horas las operaciones de los aeropuertos moscovitas debido al ataque aéreo.
La misma medida se adoptó en los aeropuertos de las ciudades de Nizhni Nóvgorod y Yaroslavl.
Según el Ministerio de Defensa, Ucrania atacó hoy territorio ruso con 337 drones, lo que la prensa local considera el mayor ataque con aparatos no tripulados desde el comienzo de la guerra por parte de ambos bandos.