São Paulo.- Claudia de la Cruz, una voz en ascensión en la extrema izquierda de EE.UU., dice en una entrevista con EFE que su país vive un «momento de caos» con el presidente Donald Trump y que hay que crear un movimiento de oposición que no pase por el Partido Demócrata, al que critica duramente.
De la Cruz, quien se encuentra en la ciudad brasileña de São Paulo para asistir a un foro anticapitalista, afirma que la población estadounidense está en «estado de shock» y que hay que «organizar el descontento».
Candidata presidencial para las elecciones de 2024 del Partido por el Socialismo y la Liberación, una pequeña formación sin representación institucional, la activista rechaza los recientes aranceles, pese a que esta política ha sido tradicionalmente asociada a su espectro político.
«Trump le dice al pueblo que está protegiendo sus empleos, pero sabemos que es mentira… Quien más sufre es siempre la clase trabajadora», asegura, antes de alertar sobre la posibilidad de que los aranceles lleven a un aumento de la inflación y al cierre de fábricas.
Según De la Cruz, hay «una metodología detrás de la locura» y el objetivo es mantener la «hegemonía» de EE.UU. frente a China y sus alianzas con los países del Sur Global.
Por otra parte, esta hija de dominicanos que habla español de forma fluida se muestra indignada por la «guerra abierta» contra los inmigrantes en situación irregular.
«Trump dice que es por causa de los inmigrantes que no hay acceso a la vivienda o al empleo, pero sabemos que la culpa no es de ellos… Los inmigrantes no controlan la economía; Wall Street, sí», apunta.
Frente a esta ofensiva, De la Cruz (Nueva York, 44 años) destaca que la comunidad migrante se ha organizado para defender a los que están en riesgo de detención, con campañas para dar a conocer los derechos que los amparan.
Al mismo tiempo, señala que la política de deportaciones no es nueva y recuerda que estas alcanzaron un récord durante la Presidencia de Barack Obama, del Partido Demócrata.
Críticas al Partido Demócrata
La crítica contra la principal formación progresista del país no se queda allí. Según De la Cruz, la reelección de Trump fue posible porque los demócratas «tiraron la toalla» y «no hablaron sobre las necesidades del pueblo» durante la campaña.
«El mayor tema en Estados Unidos es el económico, la imposibilidad de la población de poder comprar huevos, leche, pero el candidato que hablaba de eso era Trump», expone.
Pasadas las elecciones, acusa al partido de «jugar al muerto» en vez de hacer oposición, por lo que pone las esperanzas en la creciente movilización de la sociedad civil.
«No hay que reformar el Partido Demócrata; hay que crear un instrumento nuevo, independiente», afirma.
En ese sentido, De la Cruz cree que el futuro de la izquierda pasa por construir «alianzas» con sindicatos y organizaciones estudiantiles, «fuera de la política electoral».
La activista, quien no esconde sus simpatías por los regímenes de Cuba y Venezuela, dice que seguirá militando bajo la bandera del «socialismo» por mucho que en EE.UU. esa etiqueta asuste.
«Durante la campaña electoral, me di cuenta de que el pueblo estadounidense no está en contra del socialismo porque no sabe qué es», explica.
De lo que sí sabe la población, dice, es de «los crímenes y la brutalidad» del capitalismo.