NUEVA YORK — El verano es una temporada larga. Y esto es solo el principio.
El calor y la humedad del verano han regresado al área triestatal, y se avecinan tormentas fuertes y severas. Existe un alto riesgo de tiempo severo desde la tarde del jueves hasta la noche en gran parte de la región. Los vientos directos destructivos son la principal amenaza, con posibles inundaciones y granizo en algunas de las células más fuertes. Incluso es posible que se produzcan uno o dos tornados aislados.
El momento de estas tormentas favorece en gran medida la segunda mitad del día. No es hasta el final de la tarde y la noche que empezamos a ver las tormentas más fuertes adentrándose en la región.
El punto álgido de las tormentas se producirá hacia el final de la hora punta, al igual que ocurre durante el feriado Juneteenth. Si va a circular después de las 6 p.m. del jueves, prepárese para chubascos y tormentas, así que tómelo con calma, esté atento a la formación de charcas y deje suficiente espacio para el coche de delante. Las fuertes lluvias no serán ininterrumpidas, pero habrá aguaceros aislados de las tormentas más fuertes que podrían causar inundaciones menores en las carreteras de la zona.
Durante la hora punta, es probable que la mayoría de las tormentas se encuentren en el norte de Nueva Jersey, a medida que avanzan hacia nuestra zona desde el oeste.
El Servicio Meteorológico Nacional ya ha emitido una vigilancia de tormenta eléctrica severa para parte del área triestatal, incluida la Ciudad de Nueva York, hasta las 9 p.m. del jueves. El viento en línea recta es la mayor amenaza de las tormentas que se generen esta tarde y esta noche. El granizo y las inundaciones son amenazas secundarias. Tampoco se descarta la posibilidad de uno o dos tornados aislados.
Las tormentas del jueves traen consigo la posibilidad de amenazas severas, siendo la más probable la de vientos dañinos. El mayor riesgo de vientos dañinos se concentra en Nueva Jersey y la parte baja del valle del Hudson, pero la amenaza está presente en toda la región. Se pueden producir ráfagas de hasta 60 mph en estas tormentas. Esta fuerza es suficiente para derribar ramas de árboles e incluso cables eléctricos. Tenga cuidado si el jueves por la noche saca el bote de basura de la acera; no querrá despertarse con basura por todo el jardín.
Además de los vientos, estas tormentas podrían traer granizo de hasta una pulgada de diámetro. Este tamaño de granizo puede causar daños menores a la propiedad. Si puede, estacione el auto en un lugar cubierto para evitar abolladuras o grietas en el parabrisas.
Incluso la amenaza de tornado no es nula con este sistema. Las condiciones propician la rotación dentro de algunas de estas celdas de tormenta. No es una probabilidad alta, pero le recomendamos configurar su teléfono para recibir alertas meteorológicas en caso de que se emita una alerta de tornado en su área.
A pesar de la intensidad de este sistema de tormentas, no producirá grandes lluvias. La mayoría de nosotros veremos poco más de una décima de pulgada de lluvia total. Este sistema se desplaza con relativa rapidez, evitando que incluso las bolsas de lluvia más fuertes se acumulen sobre una zona durante demasiado tiempo. Sin embargo, aún anticipamos lluvias totales localmente más altas en los lugares donde se forman estos aguaceros; veremos algunas lluvias totales adicionales, del orden de media pulgada a una pulgada, pero serán muy localizadas.
Aun con las lluvias totales más bajas, las inundaciones aisladas y menores siguen siendo una preocupación, principalmente en zonas bajas y propensas a inundaciones. Esto no será una preocupación generalizada; será principalmente un problema para las zonas que reciben las lluvias totales más altas, ya que estas provienen de precipitaciones de corta duración, pero sustanciales.
La lluvia se disipará en nuestra zona temprano durante la noche a medida que el aire más seco comience a entrar rápidamente, despejando las nubes y reduciendo considerablemente la humedad. Sin embargo, esto no bajará mucho nuestras temperaturas. El viernes todavía rondará los 80 grados, antes de que veamos que las temperaturas máximas realmente comiencen a subir este fin de semana.
Las temperaturas alcanzarán los 90 grados en gran parte del área de tres estados el domingo. Y una vez que lleguemos a los 90 grados, las temperaturas se mantendrán ahí. De hecho, no solo Central Park experimentará una racha de días con temperaturas de 90 grados, sino que nos espera nuestra primera ola de calor del año… justo a tiempo para la primera semana completa de verano.
