La Seguridad Peatonal en Nueva York Amenazada por el Uso Inapropiado de Aceras por Parte de Deliveristas

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Por: Anulfo Vargas Vasquez

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Nueva York. En los últimos años, la seguridad de los peatones en las aceras de Nueva York ha estado en constante peligro debido al uso indebido de estos espacios por parte de ciclistas, motociclistas y conductores de scooters eléctricos. Un grupo que ha recibido especial atención son los repartidores, o «deliveristas», quienes a menudo invaden las zonas peatonales para realizar sus entregas con mayor rapidez. Esta práctica pone en riesgo no solo a los transeúntes en general, sino especialmente a los grupos más vulnerables: niños, ancianos y mujeres embarazadas, quienes dependen de las aceras para desplazarse de manera segura.

Un Espacio en Competencia

Las aceras han sido tradicionalmente zonas exclusivas para los peatones, diseñadas para brindar un espacio seguro, lejos del tráfico vehicular. Sin embargo, el aumento en el uso de medios de transporte alternativos, como bicicletas y scooters eléctricos, ha generado una competencia por el espacio en estas áreas. Los repartidores, presionados por la rapidez que exigen las entregas, recurren a utilizar las aceras como atajos, evitando el tráfico en las calles, lo que los convierte en una amenaza directa para la seguridad de los peatones.

Esta situación no es solo un problema de conducta individual, sino también una señal de que la ciudad de Nueva York no ha creado la infraestructura adecuada para los diferentes tipos de transporte. A medida que crece la demanda por los servicios de entrega rápida, también aumenta la presencia de ciclistas y conductores de scooters en las aceras, algo que agrava aún más la situación.

La Falta de Vigilancia y Aplicación de la Ley

A pesar de que existe una normativa clara que prohíbe el uso de las aceras para bicicletas, motocicletas y scooters, la falta de vigilancia y aplicación de la ley ha permitido que estas infracciones se multipliquen. Las autoridades de la ciudad parecen no estar imponiendo las sanciones necesarias para disuadir a los repartidores de seguir utilizando las aceras como vías de tránsito.

El problema se intensifica por la noche, cuando la menor presencia policial y la visibilidad reducida aumentan el riesgo de accidentes y atropellos. Los peatones, que deberían estar protegidos en estos espacios, se ven obligados a esquivar ciclistas y scooters que, al no tener restricciones claras, circulan libremente.

Un Llamado a la Acción

Es urgente que las autoridades locales, especialmente el Departamento de Transporte bajo la dirección del comisionado Ydanis Rodríguez, tomen medidas inmediatas para frenar esta práctica. Los peatones deben estar protegidos en las aceras, y para ello se necesita un refuerzo en la aplicación de las normativas existentes. Aumentar la vigilancia en las aceras y crear carriles exclusivos para bicicletas y scooters podría ser una solución eficaz para reducir la competencia por el espacio.

Además, es crucial que se eduque a los repartidores y a las empresas de delivery sobre las regulaciones que prohíben el uso de las aceras, y que se implementen sanciones más severas para quienes infrinjan estas normas. Los peatones de Nueva York merecen un espacio seguro para caminar, y no deben verse obligados a compartirlo con vehículos que no pertenecen allí.

Hacia una Ciudad Más Segura

La seguridad de los peatones debe ser una prioridad en una ciudad tan densamente poblada como Nueva York. Resolver el problema de la invasión de las aceras por parte de los «deliveristas» requiere un esfuerzo coordinado entre las autoridades, los repartidores y las empresas de reparto. Solo a través de la implementación de medidas estrictas y de la creación de una infraestructura adecuada para estos vehículos se podrá garantizar que las aceras sigan siendo un espacio seguro y libre de tráfico para los peatones.

Es momento de que las autoridades de Nueva York actúen con decisión para proteger a sus ciudadanos y devolver a los peatones el control de sus aceras.