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NUEVA YORK . – La gobernadora Kathy Hochul está considerando imponer sanciones legales al alcalde, lo que probablemente requeriría la aprobación tanto del concejo municipal como de la legislatura estatal.
Hochul anunciará medidas de control sobre el alcalde en una conferencia de prensa a las 4 p.m., en lugar de tomar medidas drásticas para destituirlo de su cargo.
La gobernadora ha estado conversando esta semana con miembros del Concejo Municipal y la legislatura estatal sobre su apoyo a una legislación que aumente la supervisión del alcalde.
Los legisladores estatales tendrán que aprobar estas medidas como parte de una legislación cuando regresen a Albany la próxima semana.
Al mismo tiempo, Hochul también nombrará a un subinspector general del estado con autoridad para supervisar la ciudad.
Además, creará un fondo para permitir que el contralor de la ciudad, el defensor público y la presidenta del Concejo Municipal contraten asesoría legal externa para demandar a la administración de Trump si el alcalde se niega a hacerlo.
También asignará fondos adicionales al contralor estatal para examinar las finanzas de la ciudad.
La gobernadora también quiere establecer una nueva norma que prohíba al alcalde despedir al jefe del Departamento de Investigación de la ciudad sin la aprobación del inspector general del estado.
Estas medidas equivaldrían a sanciones contra el ya debilitado alcalde, pero también le permitirán permanecer en el cargo.
Hochul ha sido reacia a anular la voluntad de los votantes. Sin embargo, con estos controles en vigor, la gobernadora cree que no será necesario destituir al alcalde.
Su anuncio se produce el mismo día en que un juez federal podría decidir si desestima o no el caso de corrupción contra Adams.
El fiscal general adjunto en funciones, Emil Bove, declaró en la corte el miércoles que la razón para desestimar el caso es que interfiere con la capacidad del alcalde para hacer cumplir la agenda de inmigración del presidente.
Hochul, una demócrata centrista al igual que Adams, ha enfrentado preguntas sobre el futuro del alcalde desde su acusación en septiembre por cargos de soborno y otros delitos. Adams se ha declarado inocente y afirmó en la audiencia del miércoles que no ha cometido ningún crimen.
Hochul ha dudado en destituirlo, argumentando que hacerlo sería antidemocrático y sumiría a la ciudad en un complejo proceso de destitución similar a un juicio, que nunca se ha utilizado contra un alcalde en funciones.
Sin embargo, después de que cuatro de los principales funcionarios de Adams renunciaran el lunes, la gobernadora expresó «serias dudas sobre el futuro a largo plazo de esta administración municipal».